Los panellets son unos bocaditos dulces típicos de Cataluña, que se toman tradicionalmente la víspera de Todos los Santos y el propio día de Difuntos. Suelen prepararse en forma de bolita y están repletos de energía. Generalmente van recubiertos de piñones, pero hay muchas otras versiones (coco, almendra, membrillo…). Pues hoy los vamos a hacer caseros.
Como siempre me gusta usar ingredientes naturales, sin harinas refinadas y la menor cantidad de azúcar posible. Tradicionalmente, los panellets se elaboran sobre una base de mazapán, es decir, almendra y azúcar, que se puede engordar con patata o boniato cocido. A la base se puede añadir coco rallado o incluso chocolate, aunque no sea lo más tradicional. La masa se modela en forma de bolitas que se rebozan en frutos secos, se pincelan con huevo, clara o yema batida, y se hornean brevemente. No es para nada complicado, pero si entretenido.
La receta que he usado para este post está inspirada en la que preparaban mis padres y sus amigos en Castellbò (Lleida). Yo era era un renacuajo y hacía lo que podía o lo que me dejaban hacer…jeje no era muy mañosa que digamos. Por suerte, las cosas han cambiado y con práctica he mejorado la técnica. A lo que íbamos, en este caso, uso boniato en lugar de patata, ya que es más dulce, y me permitirá restingir la cantidad de azúcar de la receta original. ¡Todo un acierto!
Con estas cantidades os saldrán alrededor de unos 20-30 panellets, aunque depende del tamaño que le deis. Os recomiendo que no os paséis, que son contundentes y es mejor tomarlos a pequeños bocados. Eso sí, acompañados de una copita de moscatell. ¡Ah! Y tened en cuenta que si los rebozas con piñones quedan más gordetes, una capa de más de puro placer.
Continue reading